La vida me ha enseñado que...

Tenemos por grande lo pequeño. Lo mucho por poco. Nos dedicamos a llorar por cosas que al día siguiente, solo son recuerdos que tiramos a la basura. Nos gusta que nos respeten y que nos digan que valemos mucho, pero antes de que te respeten, tienes que aprender tu a respetar, y antes de que te digan que vales mucho, haz algo que valga la pena y que tú estés orgulloso de ello. Que la vida es dura, pero tú lo eres más. Y que todo tiene su porqué; que detrás de la tormenta siempre sale el sol. Que eso de arrancar los pétalos a las margaritas tan solo sirve para creer algo que quizás no sea verdad. Y que los sueños se cumplen si tu los persigues y nunca los abandonas, no esperes que lleguen ellos solos. Que nada es imposible en esta vida si te propones hacerlo realidad. Y que la dinamita siempre viene en frascos pequeños. Que con poco, se puede hacer mucho. Y que no siempre sale todo como lo planeaste. Cada cosa a su tiempo, no tengas prisa, la vida es corta. Siempre diré que la vida tiene sus más y sus menos, y que si estamos aquí es por algo, nada pasa porque sí...